¿Tal vez fue pues nadie les enseñó a amar?
Te doy un consejo: a la hora de tener una relación íntima con tu compañero, pregúntale cuál es su fantasía sexual. Es a lo largo del momento de mayor excitación que tienden a hablar y a enseñar sus deseos sin temor ni represión. La libido habla más alto que el buen sentido.